COLEGIO NACIONAL SAN MIGUEL DE PIURA "ALMA MATER" TRABAJAR-ESTUDIAR Y VENCER

Ya han pasado muchos años de aquella promoción llamada “Gloria Pérez Salcedo” el cual fue puesto en honor a una profesora del curso de psicología que murió de cáncer ese mismo año, puedo recordar poco de aquella profesora, era alta de cabellos rizados, muchos bellos en los brazos y de grandes ojos.

Recuerdo con gran emoción aquellos últimos meses de aquel año, las camisas trazadas con enormes y perfectos dibujos en rojo y negro inspirando respeto a las secciones que nos antecedían, con dibujos extravagantes fuera de lo común como cobras, extraterrestres, letras góticas, entre otros, era la costumbre la cual no podría romperse aun cuando estaba terminantemente prohibido por el director vestir con esos atuendos, aquella advertencia nos la hacia cada lunes día de formación y en la semana los profesores a cada hora de clase , el detalle era que ellos jamás dejaban de estampar sus firmas y dejar sus mejores deseos; yo pude pedir la firma de muchos profesores que lucia con tanto orgullo en mi blanca camisa pintada de rojo y negro “Mi Alma Mater San Miguel Promo 98” .

Cuantos recuerdos se me vienen a la mente, desde un salón de cabeza cuando no había profesor, hasta un calmado y distraído salón con la profesora de química, mirándole el calzón cada vez que ella abría las piernas allí sentada en su mesa. Recuerdo en una ocasión que el alumno más viejo del salón un compañero alto y flaco “mejía”, coloco su mochila delante de su carpeta, saco una hoja de su cuaderno la cual la convirtió en un cono, se bajo el cierre de su pantalón, saco su pene y empezó a masturbarse mirando las piernas de la profesora mientras ella revisaba unas notas en su cuaderno; todo el salón lo miraba, nadie dijo nada, ni una carcajada, ni un suspiro de admiración que pudiera advertir a la profesora de tal acto. Pues este era demasiado grande y vengativo, termino por eyacular en el cono de papel que había fabricado y una gotas salpicaron en la espalda de un compañero que se había sentado delante de él, pero que nunca hablaba, era una especie de retrasado mental, solo atinaba a sonreír cuando alguien se abusaba de el, y lo hacia desde el mas pequeño .

San miguel de Piura mi alma Mater; sé que con esta pequeña historia no estoy honrando a mi alma mater, pero es una historia como cualquier otra, esas de colladas, tengo muchas, buenas y muy buenas, pues en la escuela nunca hay una mala, ni siquiera las golpizas que se recibe de los mas grandes, porque se convierten en tu historia, parte de tu vida. Espero hacer un documental de lo que viví durante 5 años en mi amado Colegio Nacional San Miguel de Piura.

También deseo hacer un reencuentro de las promociones 95-96-97-98-99-2000, del turno tarde.
Orlando Jara promoción 98 turno tarde sección B.
Si tienes un comentario que hacer déjalo, y no te pierdas de esta pagina si fuiste promoción de esos años, muy pronto organizare un reencuentro.

Y mi deseo es cantar a viva voz esa canción que me hace sentir héroe, grande y fuerte, que me extrémese el alma y me hace sentir un estudiante de secundaria otra vez.

HIMNO MATER DEL COLEGIO NACIONAL SAN MIGUEL DE PIURA

CORO
¡Amanece! ¡Amanece! ¡Amanece!
Amanece en el Norte y el Sur!
Y esa henchida de fuerza y de sangre
Nuestra alegre y viril juventud

Amanece en el ámbito patrio
Y amanece en el alma también
Y por eso lanzamos un himno
De esperanzas, de amor y de fe

ESTROFAS

Somos jóvenes, bravos y fuertes
Somos ímpetu, impulso, altivez
Y llevamos por sola divisa,
Trabajar, estudiar y vencer

Como anteo al pisar en la tierra
Nuestra fuerza renace también
De la savia que inyecta en nosotros
Nuestro amado y leal ¡San Miguel!

Y por ti viejo claustro cantemos
Porque al par que nos abres la sed
Nos ofreces el agua clarísima
De tus fuentes de luz, ¡San Miguel!

Preparemos el alma y el cuerpo
Y entre ciencia y deporte a la vez
Ensayemos el vuelo estupendo
Que nos da el porvenir ¡San Miguel

Serán tuyos los triunfos de entonces
Será tuya la dulce embriaguez
Será tuya la llave de oro
San Miguel, San Miguel, ¡San Miguel!